¿Creemos en Jesucristo como el Hijo de DIOS?

 CONTEMPLAMOS:

En este tiempo que nos preparamos para celebrar una Nueva Semana Santa, queremos contemplar la figura de Jesucristo como el Hijo de DIOS, por ello, invitamos a cada cristiano a descubrir en la persona de Jesucristo al Verbo Encarnado, justamente uno de los Santos Evangelios nos describe esta imagen en su primer capítulo, se trata de la versión escrita por el Apóstol Juan. Y cada cristiano: ¿Ha leído con atención el inicio del Evangelio Juan?

 

Contemplemos la Palabra: “Al principio existía el VERBO, y el VERBO estaba junto a Dios, y el VERBO era Dios” (Juan 1, 1). Descubrimos que el Apóstol Juan inspirado por Dios Espíritu Santo, ES iluminado para señalar que el VERBO DIVINO es una persona que se encuentra junto a DIOS PADRE desde el principio. Y cada uno de nosotros: ¿Qué podemos señalar al Contemplar el primer versículo del Evangelio de Juan?

 

Ciertamente tenemos que afirmar que, al interior del Cristianismo, hemos interpretado y traducido este versículo de diversas maneras, según las diferentes eclesiologías cristianas que han existido a lo largo de los dos mil años de nuestra Fe Cristiana, algunos dudan de la Igualdad de Adoración Divina a la persona del Verbo, es que a muchos les cuesta CREER su presencia desde el comienzo de TODO, aunque el Apóstol Juan insiste: “Al principio estaba junto a Dios” (Juan 1, 2). Por lo tanto, el Evangelista sigue afirmando que el VERBO estaba junto a DIOS, en este sentido, cuando se nombra a DIOS, para los que creemos en la Santísima Trinidad, se refiere exclusivamente a DIOS Padre. Y TÚ: ¿Cómo entiendes el ESTAR junto a DIOS Padre desde el principio?

 

Muchos evocarían el principio como la Creación del Mundo, en realidad, debemos entender un PRINCIPIO DIVINO, anterior al Acto de la Creación Divina, esto lo intenta describir el Evangelio de Juan de la siguiente manera: “Todas las cosas fueron hechas por medio del VERBO y sin ella no se hizo nada de TODO lo que existe. En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres” (Juan 1, 3-4). Con estos versículos de las Sagradas Escrituras Cristianas, podemos CONTEMPLAR la mediación del VERBO de DIOS en la Creación, por esta razón, tenemos que comprender que El VERBO existe antes de la Creación del Mundo y con ello, se nos revela que ES una Persona Divina, distinta a la Figura de Dios Padre, y que incluso este VERBO tiene el Don de la VIDA, y que se revela a la Humanidad como la LUZ. Y cada cristiano: ¿Cómo recibe este VERBO y esta LUZ?

 

Es aquí cuando hablamos del Misterio de la Encarnación Divina: “Y el VERBO se hizo carne y habitó entre nosotros” (Juan 1, 14a). Con sinceridad: ¿Descubrimos en la presencia de Jesucristo al VERBO DIVINO? Es en este reconocimiento que se manifiesta nuestra FE Cristiana. Y PARA TI: ¿Encuentras en Jesucristo al Verbo Eterno de DIOS?

 

 

DISCERNIMOS:

 

Reconociendo nuestra FE en Jesucristo, como el Verbo de DIOS, es decir, el Hijo de DIOS Padre, los invitamos a DISCERNIR JUNTOS su Vida Terrena entre nosotros, que se nos manifiesta en los Santos Evangelios, por esta razón, seguimos meditando algunos versículos del Capítulo Octavo escritos por el Apóstol Juan: “¿Acaso eres más grande que nuestro padre Abraham, el cual murió? Los profetas también murieron. ¿Quién pretendes ser tú?”

 

En este texto evangélico, nos encontramos con dos interrogantes a Jesucristo, que es cuestionado por los judíos de su tiempo, en primer lugar, sobre su grandeza: ¿Acaso Jesucristo es más importante que el Padre de la FE Judía? Recodemos que tanto en la Religión Judía, Islámica y Cristiana, se le da un reconocimiento uniforme como Padre de la FE al Patriarca Abraham, aunque en Jesucristo, aquí nos diferenciamos, con estas dos religiones, ya que CREEMOS que la persona de Jesucristo es más importante que Abraham; en segundo término, se cuestiona a Jesucristo al manifestarse como una persona que NO va a MORIR, señalando que TODOS los Profetas murieron, por ello, la pregunta: ¿Quién pretendes SER tú? Y para cada cristiano: ¿Quién es Jesucristo?

 

Siguiendo la reflexión, que nos presenta el Evangelio de Juan, podemos señalar que Jesucristo es una persona más importante que Abraham y TODOS los Profetas: ¿Creemos en esto? Desde nuestra FE Cristiana, tenemos que afirmar que Jesucristo es la persona más importante que ha nacido en este mundo, y por ende, sus PALABRAS son las importantes para nuestra FE Cristiana, por esta razón, insistimos en la Preeminencia de los Santos Evangelios al contender las PALABRAS del Hijo de DIOS, que nos sigue diciendo: “Jesús respondió: Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría nada”. Nos recuerda que su GLORIA no viene de Él mismo, no de la forma que la buscamos los seres humanos, en el éxito personal. Y cada persona que CREE en el Hijo de DIOS: ¿Qué GLORIA buscamos en esta vida terrena?

 

Al parecer, el Hijo de DIOS solamente le interesa DAR Gloria a Dios Padre: “Es mi Padre el que me glorifica, el mismo al que ustedes llaman nuestro Dios y al que, sin embargo, no conocen”. Además, Jesucristo aprovecha para decirles a los Judíos de su tiempo, que aunque ADORAN a DIOS y no lo conocen, y con sinceridad: ¿Los cristianos CONOCEMOS realmente a DIOS?

 

“Yo lo conozco y si dijera: No lo conozco, sería, como ustedes, un mentiroso”. Tal vez, como señala Jesucristo somos unos mentirosos, al reconocer que conocemos verdaderamente a DIOS, cuando solamente hemos oído algunas cosas sobre Él, más si pensamos en DIOS, como la Santísima Trinidad, imagen que nos REVELA el Hijo de DIOS, ya que Él CONOCE a DIOS, nos REVELA el Misterio de la Santísima Trinidad. Y cada cristiano: ¿Qué conoce y puede afirmar de la Santísima Trinidad?

 

En este sentido, se requiere, en primer lugar, un CONOCIMIENTO de quién es DIOS y qué nos quiere comunicar, para hacer lo mismo que Jesucristo: “Pero yo lo conozco y soy fiel a su palabra”. Y TÚ: ¿Eres FIEL a la PALABRA de la Santísima Trinidad?

 

Con la mirada puesta en nuestra Fidelidad a la Palabra de la Santísima Trinidad, entendemos el Buen Mensaje de Jesucristo: “Abraham, el padre de ustedes, se estremeció de gozo, esperando ver mi Día: lo vio y se llenó de alegría”. Aquí, en Palabras de Jesucristo, una de las razones por lo cual es más importante que el Padre Abraham, y nosotros: ¿Nos llenamos de Alegría por la presencia de Jesucristo?

 

Quizás, algunas personas seguimos en dudas hacia la persona de Jesucristo, de la misma manera que la gente de su tiempo: “Los judíos le dijeron: Todavía no tienes cincuenta años ¿y has visto a Abraham?” Sin lugar a dudas, nuestra FE Cristiana debe crecer, alimentarse y nutrirse en la presencia de Jesucristo. Y cada cristiano: ¿Cómo hace CRECER su FE?

 

Es en el Buen Mensaje de Jesucristo que se sigue fortaleciendo y nos liberamos de nuestras dudas: “Jesús respondió: Les aseguro que desde antes que naciera Abraham, Yo Soy. Entonces tomaron piedras para apedrearlo, pero Jesús se escondió y salió del Templo”. Y cada cristiano: ¿CREE en las Palabras de Jesucristo? Las cuales nos han revelado su procedencia DIVINA, con el Título: “YO SOY”. Al reconocerse como DIOS, es que se provoca la IRA de los judíos, por ello, intentan matarlo a piedrazos, aunque todavía no había llegado su Hora, el momento en el cual manifestaría la Gloria Divina. Y PARA TI: ¿Cómo se revela la Gloria Divina en la persona de Jesucristo, Verdadero Dios?

 

 

EVANGELIZAMOS:

 

Desde nuestras revelaciones personales y comunitarias en la persona del VERBO Encarnado queremos RENOVAR la EVANGELIZACIÓN CRISTIANA, con la Esperanza puesta en la Unidad de los Cristianos, y que logremos descubrir que TODAS las personas que CREEMOS en Jesucristo, como el Hijo de DIOS, somos parte de su Iglesia: Y cada cristiano: ¿Cómo RENUEVA su Vida Cristiana en las PALABRAS del Verbo Encarnado?

 

Justamente desde la Renovación Personal vamos fortaleciendo nuestra Fe Cristiana, por ende, si cada MIEMBRO se Fortalece, es que TODA la Iglesia de Jesucristo va creciendo. En la misma medida que cada cristiano CRECE en su FE hacia el Hijo de DIOS. Y PARA TI: ¿Cómo RENUEVAS tu FE en Verbo Encarnado? ¿Cómo Restauras tu Vida Cristiana en la persona de Jesucristo, el Hijo de DIOS?