¿Por qué conmemoramos la Última Cena?

 CONTEMPLAMOS:

Este JUEVES SANTO, queremos contemplar la celebración de la Última Cena, la de Jesucristo con sus primeros seguidores, por la FE que hemos recibido, desde la Tradición Apostólica, creemos que en este día, un JUEVES, el Maestro se reunió con sus discípulos  para celebrar JUNTOS este Misterio Pascual. Y nosotros, en nuestras comunidades cristianas: ¿Cómo celebramos JUNTOS este Misterio del Hijo de DIOS?

 

Ciertamente al hablar del Misterio, es casi lo mismo que hablar de Sacramento, siendo este un ELEMENTO de UNIDAD para TODOS los cristianos, ya que las Iglesias Cristianas, en sus diferentes denominaciones, CREEMOS en el Sacramento de la Eucaristía, al igual que en el Sacramento del Bautismo, son los dos ritos Sacramentales que nos UNEN a TODAS las personas que creemos en Jesucristo. Y en tu Iglesia: ¿Qué importancia tiene la celebración sacramental del memorial de la Última Cena?

 

En este punto, no queremos detenernos en la diversidad de nombres que le hemos dado a este RITO, a lo largo de la historia del cristianismo, desde la Fracción del Pan, como le llamaban los primeros seguidores de Jesucristo, según el Libro Histórico de los Hechos de los Apóstoles, hasta la Eucaristía, el nombre más formal en la actualidad, aunque coloquialmente algunos le denominan Misa. En realidad, queremos señalar que tenemos varios SIGNOS de UNIDAD entre TODOS los cristianos. Y TÚ: ¿Cómo celebras la UNIDAD de TODOS los cristianos en la Celebración de la Eucaristía o Cena del Señor?

 

Con ello, estamos intentando descifrar un ¿Por qué?, ya que pueden haber varios más, sobre la razón de nuestra Conmemoración de la Última Cena, los cristianos debemos descubrir que cuando celebramos este Rito Sacramental nos estamos UNIENDO a Jesucristo, Verdadero Ser Humano y Verdadero DIOS, por ello, nos UNIMOS a su CUERPO. Y cada cristiano: ¿Cómo se UNE al CUERPO de Jesucristo?

 

Ahora bien, al hablar de CUERPO, no estamos pensando solamente en los dones del Pan y Vino, los que se utilizan para CELEBRAR este Rito Sacramental, sino que estamos contemplando el CUERPO de Jesucristo, el cual describe el Apóstol PABLO en sus cartas, si, las CARTAS que se encuentran en nuestras Biblias Cristianas, se trata de la IGLESIA, porque este es el CUERPO de Jesucristo; ya que la IGLESIA es su CUERPO, así lo describen las Sagradas Escrituras, por ende, recibir el CUERPO de Jesucristo conlleva recibir a TODOS los cristianos. Y TÚ: ¿Cómo recibes el CUERPO de Jesucristo?

 

En la UNIDAD de TODOS los CRISTIANOS; que SOMOS miembros de la Iglesia de Jesucristo nos queremos UNIR en nuestras celebraciones del Memorial de la Última Cena, con la misma INTENCIÓN del Hijo de DIOS. Y PARA TI: ¿Cuál es tu intención?

 

 

DISCERNIMOS:

 

Desde la INTENCIÓN de cada cristiano, queremos invitarlos a DISCERNIR JUNTOS este Misterio de la Eucaristía, para ello, tomaremos el texto del Evangelista Marcos, recordando que también se encuentra en los Santos Evangelios de Mateo y Lucas, hemos elegido el Evangelio de Marcos por ser el texto más antiguo de los tres Evangelios Sinópticos. Descubramos JUNTOS, TODOS los cristianos, el acontecimiento del Memorial de la Última Cena: “Al atardecer, Jesús llegó con los Doce”.

 

Sin lugar a dudas, los textos evangélicos nos sitúan ante el grupo íntimo de los DOCE, los que conocemos como Apóstoles, de los DOCE surgen las diferentes Tradiciones Eclesiales, que conocemos como Tradición Apostólica, con ellos Jesucristo celebra su Última Cena, recordemos que ya nos acercamos a la PASIÓN del Hijo de DIOS; con este telón de fondo, el Maestro señala lo siguiente: “Y mientras estaban comiendo, dijo: Les aseguro que uno de ustedes me entregará, uno que come conmigo”.

 

Aunque los DOCE fueron elegidos por el Hijo de DIOS, el mismo Jesucristo ANUNCIA que UNO de ellos lo va a traicionar, lo va a entregar a las autoridades para ser JUZGADO. Y cada uno de nosotros: ¿En qué formas seguimos entregando y traicionando a Jesucristo? ¿Cómo nos sentimos al reconocer nuestras traiciones a Jesucristo?

 

Es lo que nos revela el mismo Evangelio: “Ellos se entristecieron y comenzaron a preguntarle, uno tras otro: ¿Seré yo?” El Evangelista Marcos nos revela la TRISTEZA de los DOCE al saber que UNO de ellos iba a ENTREGAR al Maestro. Y cada cristiano: ¿Se siente TRISTE al traicionar al Hijo de DIOS?

 

Ciertamente nuestra traición se manifiesta en dejar de realizar la Voluntad Divina, en nuestros pecados personales y sociales, aunque al igual que los Apóstoles nos cueste reconocerlos al principio, ya que, a veces, necesitamos de la SEÑAL del mismo Hijo de DIOS: “Él les respondió: Es uno de los Doce, uno que se sirve de la misma fuente que yo”. Y nosotros, que nos hemos alimentado del mismo Cuerpo del Hijo de DIOS, cuando celebramos la Cena del Señor: ¿Cómo reconocemos nuestras faltas?

 

Reconocimiento que debe estar unido a nuestro conocimiento sobre las consecuencias de nuestros actos y obras: “El Hijo del hombre se va, como está escrito de él, pero ¡ay de aquel por quien el Hijo del hombre será entregado: más le valdría no haber nacido!” Y cada creyente en Jesucristo: ¿Reconoce las consecuencias de sus OBRAS de cada día? ¿Obramos conforme a la Voluntad Divina o según nuestra propia Voluntad Humana? Y TÚ ¿Eres un Cristiano consciente de tus propios pecados?

 

En este contexto de la Debilidad y Fragilidad Humana, el HIJO de DIOS nos deja su propio memorial, el cual se instituye de la siguiente forma: “Mientras comían, Jesús tomo el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: Tomen, esto es mi Cuerpo”.

 

Un PAN que representa el CUERPO de Jesucristo, que se DA como ALIMENTO a sus primeros seguidores, el cual es bendecido, partido y distribuido para ser consumidos por los Apóstoles, y nosotros: ¿Cómo nos seguimos ALIMENTANDO del Cuerpo de Jesucristo?

 

Ya que no es solamente su CUERPO, ya que se UNE un segundo SIGNO: “Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, y todos bebieron de ella”. Es por medio de la COPA de vino, que dando gracias, es entregada para que TODOS beban de ella, de la misma manera, JESUCRISTO se ENTREGA a TODA la Humanidad, para que BEBAMOS de su Gracia Divina. Y cada cristiano: ¿Cómo seguimos bebiendo de la Copa de la Salvación?

 

Desde la Manifestación de la COPA de Salvación para TODAS las personas que beben de ella, el Maestro nos revela el siguiente Misterio: “Y les dijo: Esta es mi Sangre, la Sangre de la Alianza, que se derrama por muchos”. Ya que la COPA de vino representa su SANGRE, recordemos que la Sangre en la mentalidad judía, bíblica es la que contiene el ALMA; por lo tanto, se trata de la UNIDAD con el ALMA del Hijo de DIOS. Y TÚ: ¿Cómo te mantienes UNIDO al Cuerpo y el Alma de Jesucristo?

 

Justamente esta UNIDAD implica vivir en una NUEVA ALIANZA con el Hijo de DIOS, que se manifiesta en su ALMA derramada por la salvación de muchos, y cada persona: ¿Cómo es parte de esos MUCHOS que nos hablan los Santos Evangelios? Además, el SER PARTE de los muchos conlleva un nuevo CAMINO de Vida: “Les aseguro que no beberé más del fruto de la vid hasta el día en que beba el vino nuevo en el Reino de Dios”.

 

Con estas palabras de Jesucristo, nos REVELA que el nuevo CAMINO es nuestro peregrinar hacia el REINO de DIOS. Y PARA TI: ¿Cómo te ALIMENTAS de Jesucristo, Cuerpo y Alma, en tu camino de Vida hacia el Reino de DIOS?

 

 

EVANGELIZAMOS:

 

Desde nuestra ALIMENTACIÓN, que recibimos del mismo Hijo DIOS, vamos caminando en la nueva EVANGELIZACIÓN que nos REVELA Jesucristo, en este JUEVES SANTO, con los signos de PAN y VINO que representan su Cuerpo y Sangre (ALMA), los cuales nos fortalecen en nuestro Peregrinar al Reino de DIOS. Y TÚ: ¿Cómo PEREGRINAS al Reino? ¿Cómo te ALIMENTAS del Cuerpo y Alma de Jesucristo?

 

En el PEREGRINAR de cada cristiano se manifiesta la Evangelización Cristiana, la que se FUNDA en la ENTREGA de Hijo de DIOS, en un Sacramento que nos revela la GRACIA de DIOS, que viene y vendrá en cada persona que CREE en Él, manifestando, de esta forma, el Misterio Divino de Salvación que se lleva a cabo en el acontecimiento de la Muerte en CRUZ y la Resurrección al tercer día: ¿Creemos en estos Misterios Divinos revelados en, con y por la persona del Hijo de DIOS? Y PARA TI: ¿Cómo mantienes la UNIDAD con el Cuerpo y Alma de Jesucristo? ¿Por qué CELEBRAS la Cena del Señor?