¿Creemos en la Vida Eterna?
CONTEMPLAMOS:
En este día domingo, queremos contemplar la realidad de
la Vida Eterna, afirmando que si fuéramos capaces de ampliar nuestra concepción
religiosa particular, podríamos acordar con muchos creyentes, pertenecientes a
otras religiones, que CREEMOS JUNTOS en una VIDA después de esta existencia
terrena. Y TÚ: ¿Crees en la Vida Eterna?
Tal vez, es un punto
de partida a la hora de CREAR lazos de UNIDAD en la diversidad de religiones
existentes en el mundo, ya que la gran mayoría tiene la creencia teológica de
la Unidad de los Seres Humanos con sus respectivos Dioses en la Vida Eterna,
para muchos esta vivencia se da en un LUGAR especial, en un Estado de VIDA
diferente a la Vida Terrena: Y TÚ: ¿Cómo IMAGINAS esta Vida Eterna?
Ahora bien, en el
sentido que le DA cada religión al ¿Cómo? llegamos a la Vida Eterna, es en
dónde se marcan nuestras mayores diferencias entre una religión y otra, ya que
para unos es por la pertenencia a un Pueblo, cultura o religión, para otros es
un Estado de Iluminación que se alcanza durante la Vida Terrena, algunos creen
que se obtiene por la manera en que vivimos nuestra Existencia Humana, desde
estas miradas particulares que se obtienen en cada religión, surge la
contemplación individual, la creencia que tiene cada persona del ¿Cómo llegar a
la Vida Eterna? Y para cada uno de nosotros: ¿Cómo CREEMOS que logramos alcanzar
la Vida Eterna?
Nos atrevemos a
afirmar, aunque CREEMOS que no DEBE SER así, en el mismo CRISTIANISMO cada Iglesia
Particular tiene diferentes concepciones teológicas y doctrinales para explicar
el ¿Cómo? cada miembro logra llegar a la Vida Eterna. Y cada cristiano: ¿Qué
HACE para lograr este objetivo de la Vida Cristiana?
Desde nuestro quehacer personal e individual queremos
contemplar esta realidad de la Vida Eterna, señalando la importancia de CREER,
afirmando la IMPORTANCIA que debe tener este tema para cada CRISTIANO;
descubriendo que no basta con CREER, sino que nuestra forma y ESTILO de VIDA
debe estar en COHERENCIA con la FE que profesamos, por ende, si decimos CREER
en la VIDA Eterna, esta CREENCIA nos debe llevar a TENER una Vida diferente a
la vivencia de las otras personas que NO creen en este Misterio Divino, que
también fue revelado y anunciado por el mismo Hijo de DIOS, ya que en muchos
discursos de Jesucristo nos encontramos con sus enseñanzas para que sus
seguidores logren alcanzar la Vida Eterna, y nosotros, que nos autodenominamos
discípulos de Jesucristo: ¿Qué enseñanzas creemos que son las más importantes
para alcanzar la Vida Eterna? Y PARA TI: ¿Qué destacas de las palabras de
Jesucristo como Fuente de Vida Eterna? ¿Qué interpretas desde la Biblia
Cristiana? ¿Qué texto es primordial en los Santos Evangelios a la hora de
hablar sobre la Vida Eterna?
DISCERNIMOS:
Desde esta interrogante, que realizamos en el momento de
contemplación: ¿Qué enseñanzas creemos que son las más importantes para
alcanzar la Vida Eterna? Es que deseamos invitarlos a DISCERNIR JUNTOS al Evangelista
Lucas en el capítulo 10 de su primer libro, es un relato que NO encontramos en
ningún otro Evangelio, por esta razón, lo queremos destacar como una ENSEÑANZA
esencial y una de las más importantes en la vida cristiana para alcanzar la
Vida Eterna. “Y entonces, un doctor de la Ley se levantó y le preguntó para ponerlo a
prueba: Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la Vida eterna?”
La narración comienza con un doctor de la Ley que le pregunta a
Jesucristo sobre que se debe HACER para HEREDAR la Vida Eterna, debemos darnos
cuenta que utiliza la palabra “Heredar”, con ello, se sitúa como parte del
Pueblo de Israel, el PUEBLO elegido, por esta razón, es probable que su
pensamiento era que no había que HACER nada, ya que eran ELEGIDOS; y heredaban
por DERECHO propio al Ser considerados Hijos de DIOS; tal vez, muchos
cristianos, en la actualidad, que se sienten y creen HIJOS de DIOS piensan lo
mismo, tal vez, el Maestro nos sigue haciendo la misma pregunta: “Jesús le
preguntó a su vez: ¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?” Y TÚ: ¿Qué
lees en la Ley Hebrea? ¿Qué comprendes de la Ley de DIOS?
Quizás le pregunta sobre la LEY, porque estaba hablando con un Doctor de
la LEY, el cual destaca lo siguiente: “Él le respondió: Amarás al Señor, tu
Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo
tu espíritu, y a tu prójimo como a ti mismo”. Con estas frases, tomadas de dos
pasajes de la Ley Judía; y que para nosotros, los cristianos, lo encontramos en
los libros del Pentateuco; se afirma que lo único importante es AMAR: Amar a
DIOS, Amar a uno mismo y Amar al prójimo. Y TÚ: ¿Amas en estas tres
dimensiones?
Ahora bien, para nosotros, los cristianos, esto toma ribetes de enseñanza
cristiana en las palabras del Hijo de DIOS: “Has respondido exactamente, le
dijo Jesús; obra así y alcanzarás la vida”. Por lo tanto, logramos deducir que Jesucristo, por
medio de la respuesta al Doctor de la LEY, nos envía a OBRAR en el AMOR para
alcanzar la Vida ETERNA; con ello, nos podemos preguntar: ¿Cómo OBRAMOS en el Amor
a DIOS, a nosotros y al prójimo?
Tal vez, es la mayor
interrogante que tenemos los seres humanos: ¿Cómo OBRAR en el AMOR? Es decir,
que debemos hacer para MANIFESTAR nuestro AMOR, aunque el texto evangélico se
dirige hacia otro horizonte: “Pero el
doctor de la Ley, para justificar su intervención, le hizo esta pregunta: ¿Y
quién es mi prójimo?”
Se nos invita a FIJAR nuestra mirada y pensamiento en uno de los
destinatarios de nuestro AMOR, y no se trata de DIOS, como la mayoría de
creyentes le gusta manifestar: Adorar y AMAR a DIOS por sobre todo; sino que nuestro
discernimiento nos conduce al Prójimo, y para cada uno de nosotros: ¿Quién y
quiénes son nuestro prójimo?
Para muchos el prójimo son todas las personas que se encuentran a nuestro
alrededor, ya que es similar a la palabra próximo, aunque el Maestro nos enseña
algo más sobre el prójimo, que no se trata solamente de cercanía, con la
siguiente parábola: “Jesús volvió a tomar la palabra y le respondió: Un hombre
bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos ladrones, que lo
despojaron de todo, lo hirieron y se fueron, dejándolo medio muerto.
Casualmente bajaba por el mismo camino un sacerdote: lo vio y siguió de largo.
También pasó por allí un levita: lo vio y siguió su camino”.
En la parábola nos encontramos con un hombre que tuvo, como próximo, a un
grupo de ladrones que le robaron TODO, de tal forma, que casi lo matan; también
se le aproximaron, en el mismo camino, un sacerdote y un levita que pasaron de
largo, sin hacer nada por el hombre moribundo, según, tu parecer: ¿Cómo se
comportaron estas personas con el Hombre que viaja de Jerusalén a Jericó?
Más allá de nuestras apreciaciones personales, el Maestro continúa su
enseñanza con la incorporación de otro personaje a la parábola: “Pero
un samaritano que viajaba por allí, al pasar junto a él, lo vio y se conmovió. Entonces se
acercó y vendó sus heridas, cubriéndolas con aceite y vino; después lo puso
sobre su propia montura, lo condujo a un albergue y se encargó de cuidarlo. Al
día siguiente, sacó dos denarios y se los dio al dueño del albergue,
diciéndole: Cuídalo, y lo que gastes de más, te lo pagaré al volver”.
Este personaje era una persona Samaritana que ayuda al hombre moribundo,
lo ayuda curando y vendando sus heridas, además lo lleva a un albergue en dónde
lo cuida toda la noche, y después cancela la cuenta con el dueño afirmando que
pagará lo que se siga gastando por el cuidado de esa persona, es aquí, que
viene la pregunta que debe seguir resonando en los corazones de TODOS los
cristianos: “¿Cuál de los tres te parece que se portó como prójimo del hombre
asaltado por los ladrones?”
Ya que en la pregunta se encuentra la enseñanza sobre el prójimo, para
ser PRÓJIMO de alguien, en palabras de Jesucristo, hay que PORTARSE como tal, o
sea, comportarse como un PRÓJIMO de las personas que nos encontramos en el
camino, porque, aunque estuvieron próximos, NO fueron su PRÓJIMO los asaltantes,
ni el sacerdote ni el levita, entonces: ¿Quién fue prójimo de este hombre que
viajaba desde Jerusalén a Jericó?
“El que tuvo compasión de él, le respondió el doctor. Y
Jesús le dijo: Ve, y procede tú de la misma manera”. Con esta
última frase de Jesucristo, se nos invita a proceder de la misma manera, o sea,
se nos recuerda que en primer lugar, hay que COMPORTARSE como PRÓJIMO de los
demás, y esto se inicia con un acto de compasión por los demás: ¿Somos los
cristianos personas compasivas? Y PARA TI: ¿Procedes de manera compasiva con
las personas que te rodean y te encuentras en el camino de la Vida?
EVANGELIZAMOS:
Justamente una NUEVA EVANGELIZACIÓN requiere un
compromiso real con la VIVENCIA de las enseñanzas de Jesucristo, que por medio
de esta parábola, no tan solamente nos enseña sobre el ¿Cómo HEREDAR la Vida
Eterna?, sino también a como demostrar nuestro AMOR a las demás personas,
recordando siempre sus Palabras: VE y PROCEDE. Y TÚ: ¿Cómo VIVES este AMOR al
prójimo en miras a alcanzar la Vida Eterna?
Justamente la Vida Cristiana conlleva un IR y PROCEDER
según las PALABRAS del Hijo de DIOS; ya que estas palabras se transforman en
ENSEÑANZAS para todos los cristianos; este sería el GRAN SIGNO de UNIDAD para
todo el cristianismo: “Ve, y procede tú de la misma manera”. Y PARA TI: ¿Has descubierto que tu vida
VA y debe IR hacia la Vida Eterna? ¿Has comprendido que PROCEDER conlleva AMAR
a tu prójimo? ¿Eres una persona compasiva a ejemplo del Buen Samaritano?
Palabra del Señor.
ResponderBorrarVivir como cristiana, como verdadera cristiana, conlleva tener una vida basada en los Santos Evangelios, poniendo a Jesucristo como cerebro, medio y fin de nuestras vidas.
En ITAE, nuestras propuestas es caminar juntos con respeto, empatía y cariño para que cada uno pueda encontrar un camino verdadero a Cristo.
Restaurando y renovando nuestro camino en nuestra fe, sin sentirnos herederos por el simple hecho de "nacer" en un credo, si no, más bien, en la rectitud de nuestro corazón cercano a Dios Trinidad.