SOMOS EL CENTRO DE LA ENSEÑANZA DE JESUCRISTO
CONTEMPLAMOS:
Este domingo, primer día de la semana, queremos
centrar nuestra mirada en la propuesta de Jesucristo que vino a llamar y
buscar, con ello, nos queremos adentrarnos en el misterio de cada SER HUMANO;
ya que es el sentido y la finalidad divina, todo ha sido creado para el SER
HUMANO; y Jesucristo vino al mundo para SALVAR a cada PERSONA; a cada
individuo, por esta razón, es que Jesucristo nos ubica en el centro de su
ENSEÑANZA y con sus obras se centra en el ser humano, es a lo que te queremos
INVITAR, que contemplemos la HUMANIDAD desde los demás, desde las otras personas:
¿Cómo es tu forma de actuar hacia los demás?
Cuando hablamos de los demás, no estamos
pensando en los que queremos y amamos, ni familiares ni amigos, sino en
aquellos que no nos caen bien, incluso aquellos que son nuestros adversarios en
diversas situaciones de la vida, con los que competimos a diario, en el deporte
para derrotarlos, en el trabajo por un ascenso o en los debates de política,
economía, religión o fútbol: ¿Cómo es nuestro trato con ellos?
Aquí viene el ejemplo de Jesucristo a darnos luces
de nuestra forma de proceder, de ser capaces de poner al OTRO en primer lugar,
por sobre mis pensamientos, mis ideologías, mis opiniones, o sea, que la
PERSONA sea más importante que lo CREEMOS y PROFESAMOS: ¿Es así para los
cristianos a ejemplo de Jesucristo?
En verdad, cada día que entramos más y más en la
profundidad de los Santos Evangelios, más cuenta nos damos que ALEJADOS y
PERDIDOS estamos los cristianos en la actualidad a la hora de la vivencia de un
auténtico y verdadero cristianismo, afirmando que el CENTRO de la FE CRISTIANA,
se encuentra en Jesucristo, sobre todo en sus enseñanzas, y su testimonio de
vida que nos sirve como MODELO para cada cristiano: ¿Vives como otro
Jesucristo?
Algunos señalaran inmediatamente la
imposibilidad, dirán Él es DIOS; y se olvidan que también fue verdadero SER
HUMANO; o sea, sentía como nosotros, poseía una voluntad humana, tenía deseos y
gustos, generaba en su interior emociones encontradas y sentimientos que lo
perturbaban como cualquier ser HUMANO; ante ello, ORABA; como un acto de
comunicación con Dios, su PADRE, para DISCERNIR qué era lo que le pedía, y no
llegará a caer en la TENTACIÓN, quizás por ello, esto se lo repitió varias
veces a sus discípulos antes de ser entregado para morir en la CRUZ: “Cuando llegaron,
les dijo: Oren, para no caer en la tentación” (Lucas 22, 40). Y los cristianos: ¿Cuántas veces hemos caído
en la tentación? En la tentación de la soberbia, del orgullo, de creernos
TODOPODEROSOS; de sentirnos que TODO lo logramos solamente por nuestros propios
méritos y esfuerzos humanos, tan así, que algunos CREEN que la Salvación de
Dios, la alcanzarán por medio de sus propias obras. Y TÚ, como cristiano del
tercer milenio: ¿Qué crees?
DISCERNIMOS:
Al invitarlos a discernir, queremos cuestionar
nuestra forma de vivir la FE Cristiana; para mirar a Jesucristo, ya que desde
sus palabras y gestos anhelamos descubrir el ¿Cómo DEBEMOS vivir los cristianos
en el tercer milenio? Para que esto sea posible, en este domingo, les invitamos
a leer el Evangelio de Marcos en su segundo capítulo, por el cual interpretaremos
y meditaremos los gestos del Maestro, y ver que nos enseña para nuestras vidas
en la actualidad: “Jesús salió nuevamente a la orilla del mar; toda la gente
acudía allí, y él les enseñaba (Marcos 2, 13). Al parecer, era cotidiano que
Jesucristo enseñará a la gente que lo seguía, en especial, a sus discípulos, y
nosotros: ¿Qué tan seguido recibimos la enseñanza de Jesucristo?
Esta pregunta, ya nos puede situar en nuestra
forma de vivir el cristianismo, ya que debemos reconocer que la gran mayoría de
cristianos, no le interesa aprender más de su FE, miles de bautizados día a
día, viven como si las PALABRAS de Jesucristo no tuvieran sentido para sus
existencias, todavía a muchos más NO les interesa investigar más sobre las
enseñanzas de Jesucristo, descritas en los Santos Evangelios, les da flojera
LEER; la mayoría prefiere quedarse con la interpretación que hacen sus pastores
o ministros, poco hacen por sí mismos para RENOVAR su FE Cristiana. Y TÚ: ¿Qué
haces al respecto?
Esta es una de las intenciones que tenemos en la
ITAE: con el blog, en cada artículo teológico, y en este LIBRO: “Un Evangelio
para tu Domingo”, es DESPERTAR en ustedes el interés por su FE CRISTIANA, que
nace del encuentro con el mismo Jesucristo, que sigue pasando por nuestras
vidas, como lo hizo hace dos mil años: “Al pasar vio a Leví, hijo de Alfeo,
sentado a la mesa de recaudación de impuestos, y le dijo: Sígueme. Él se
levantó y lo siguió” (v. 14). Una mirada, una palabra, un llamada. Y nosotros: ¿Cómo
le respondemos al MAESTRO?
Muchos ponemos mil excusas para NO seguirlo,
otros ven miles de obstáculos para tener una auténtica vivencia de su Fe
Cristiana, cuestionan y cuestionan, tal como lo hacían los escribas y fariseos
en el tiempo del Señor: “Mientras Jesús estaba comiendo en su casa, muchos
publicanos y pecadores se sentaron a comer con él y sus discípulos. Los
escribas del grupo de los fariseos, al ver que comía con pecadores y
publicanos, decían a los discípulos: ¿Por qué come con publicanos y pecadores?”
(vv. 15-16). Juzgaban el obrar de Jesucristo, ya que sentaba a la mesa con
publicanos y pecadores, de la misma manera, hemos visto, como eligió y llamó a uno
de ellos para ser su discípulo, justamente los pecadores son los elegidos y los
predilectos del Señor Jesucristo. Es aquí la enseñanza del Maestro: “Jesús, que
había oído, les dijo: No son los sanos los que tienen necesidad del médico,
sino los enfermos. Yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”
(v. 17). Y TÚ: ¿Te consideras una persona justa o pecadora?
Él mismo se presenta como el MÉDICO, que viene a
SANAR a los que necesitamos de su sanación: ¿De qué necesitamos ser SANADOS por
Dios Trinidad? Ante esta pregunta, les invitamos a ir más allá de lo obvio, que
es nombrar las ENFERMEDADES del cuerpo, del alma y de la mente; les invitamos a
DISCERNIR sobre la SANACIÓN de nuestro orgullo, soberbia y egoísmo, de nuestra
mala forma de PENSAR.
“Un día en que los discípulos de Juan y los
fariseos, fueron a decirle a Jesús: ¿Por qué tus discípulos no ayunan, como lo
hacen los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos? Jesús les
respondió: ¿Acaso los amigos del esposo pueden ayunar cuando el esposo está con
ellos? Es natural que no ayunen, mientras tienen consigo al esposo. Llegará el
momento en que el esposo les será quitado, y entonces ayunarán” (vv. 18-20). No
pensar como la mayoría en el ambiente religioso, de los cristianos comunes,
sino SER distinto, no tener las mismas prácticas vacías y ritualistas, como, en
este caso, del ayuno; sino a dar un PASO; y RENOVARNOS: ¿Quieres RENOVAR y
RESTURAR tu FE Cristiana?
“Nadie usa un pedazo de género nuevo para
remendar un vestido viejo, porque el pedazo añadido tira del vestido viejo y la
rotura se hace más grande. Tampoco se pone vino nuevo en odres viejos, porque
hará reventar los odres, y ya no servirán más ni el vino ni los odres. ¡A vino
nuevo, odres nuevos!” (vv. 21-22). Es lo que implica, el cristianismo es como
un VINO NUEVO; por ende, necesita ODRES NUEVOS; es decir, personas NUEVAS;
nuevos fariseos, nuevos discípulos de JUAN; nuevos católicos, nuevos
evangélicos, que DISCIERNEN su FE y la hagan CRECER y MADURAR para dar BUEN
FRUTO: ¿Lo damos?
“Un sábado en que Jesús atravesaba unos
sembrados, sus discípulos comenzaron a arrancar espigas al pasar. Entonces los
fariseos le dijeron: ¡Mira! ¿Por qué hacen en sábado lo que no está permitido?”
(vv. 23-24). Personas que NO se preguntan si está permitido o si se encuentra
escrito en la LEY, aunque sea divina, sino que VIVEN poniendo en el CENTRO del
discernimiento a las PERSONAS, como lo realizaba Jesucristo: “Él les respondió:
¿Ustedes no han leído nunca lo que hizo David, cuando él y sus compañeros se
vieron obligados por el hambre, cómo entró en la Casa de Dios, en el tiempo del
Sumo Sacerdote Abiatar, y comió y dio a sus compañeros los panes de la ofrenda,
que sólo pueden comer los sacerdotes?” (vv. 25-26).
Las respuesta de Jesucristo se convierten en
nuestras ENSEÑANZAS, ellas nos REVELAN y manifiestan la voluntad divina, la
NUEVA FORMA de interpretar las Sagradas Escrituras, no de la forma tradicional
o como nos siguen inculcando las tradiciones eclesiales anquilosadas en la EDAD
MEDIA o en el siglo pasado; sino las tradiciones que surgen del RENUEVO y del
impulso del Espíritu Santo, a la luz de la vivencia de una FE Cristiana para
este tercer milenio, aunque con el corazón en las palabras del Maestro: “Y
agregó: El sábado ha sido hecho para el hombre, y no el hombre para el sábado.
De manera que el Hijo del hombre es dueño también del sábado” (vv. 27-28). Y
PARA TI: ¿Has comprendido que ha hecho DIOS para el SER HUMANO, para cada uno
de nosotros?
EVANGELIZAMOS:
Justamente a la luz de Jesucristo, el Maestro, comprendemos
que DIOS ha hecho TODO para nosotros, esto es en general, el mundo actual lo ha
entendido, y muchos creyentes llegan a AFIRMAR que Dios quiere la FELICIDAD
para cada uno de nosotros; si es así: ¿Eres una PERSONA FELIZ? ¿Qué haces a
diario para alcanzar la FELICIDAD?
Muchos cristianos a ejemplo de Jesucristo
resumen TODO en el AMOR: amor propio, amor a Dios y amar a los demás; si es de
esta forma: ¿Cómo recibimos el AMOR en nuestras vidas? ¿Estamos disponibles
para AMAR a los demás?
Desde esta vivencia personal del Amor y la
Felicidad, como búsqueda de la PLENITUD de cada ser humano, es lo que desea Dios,
ya que las LEYES están hechas para los seres humanos, y no el ser humano para
las leyes: ¿Entendemos esto que Dios hace por nosotros?
Si logramos entender esto como VERDAD de la FE
Cristiana, nuestra evangelización se centraría en las PERSONAS, en su
FELICIDAD, en que seamos amados, siendo PERSONAS LIBRES; y no esclavos de
normas y ritos. Y TÚ: ¿Vives en la LIBERTAD de los hijos e hijas de Dios?
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